08 de desembre 2020

El jutge estima en 6,6 milions de metres cúbics els presumptes abocaments de 49 empreses agrícoles a la mar Menor

Des de l'obertura del "caso Topillo" en 2017 (desembre) , iniciada per la denúncia del fiscal superior de Múrcia, perquè s'investigués la presumpta utilització d'aigua contaminada per nitrats extreta dels aqüífers subterranis a Cartagena, que no pot ser utilitzada per al reg; el procés consistia en desalobrar l'aigua extreta, el que provocava abocaments de salmorra no autoritzats a la mar Menor. S'han realitzat múltiples informes pericials de cultius, així com la guàrdia civil va fer intervencions per a clausurar dessalobradores i pous il·legals. Amb el transcurs de la recerca a les 63 empreses agrícoles que havien arribat a contaminar per falta de proves es van descartar 14, quedant 49 en el procés d'imputació. El jutge per a dictaminar la responsabilitat de cada empresa es guiaria per cinc criteris. El jutge amb això pretén determinar el dany produït en l'aire, l'aigua, el sòl i l'ecosistema del mar Menor. A si mateix l'impacte que això produeix en la salut de les persones i en l'economia.  Entre els investigats a part de les empreses agrícoles trobem a ex alts càrrecs polítics i a la Confederació Hidrogràfica del Segura.


Operario trabajando en la limpieza de algas podridas en las playas del mar Menor


El País 24/11/2020

Medio centenar de empresas agrícolas del Campo de Cartagena (Murcia) podrían haber vertido al mar Menor un total de 6,6 millones de metros cúbicos de salmueras de manera ilegal, procedentes de la desalobración no autorizada de unos 26,5 millones de metros cúbicos de agua extraída de los acuíferos subterráneos de la zona.

Así lo afirma en un auto notificado este martes el titular del juzgado de Instrucción número 2 de Murcia, Ángel Garote, que está al frente de la causa abierta contra esas empresas y organizaciones agrarias en el denominado “caso Topillo”, que se inició en diciembre de 2017. El magistrado, que hace justo un año llamó a declarar como investigados a los responsables de 63 empresas agrarias por esos supuestos delitos de vertidos ilegales, ha sobreseído ahora las actuaciones sobre 14 de ellas por falta de indicios, pero mantiene la investigación sobre las otras 49, para las que ha pedido nuevas pruebas periciales que permitan individualizar cuánto daño hicieron cada una de ellas al ya de por sí afectado ecosistema del Mar Menor, en situación de colapso desde hace años, y el posible perjuicio económico causado.

La investigación, que partió de una dura denuncia del fiscal superior de la comunidad autónoma, José Luis Díaz Manzanera, trata de esclarecer si estas empresas extrajeron agua contaminada por nitratos de los acuíferos de Cartagena, que no sirve para el riego, y la trataron en desalobradoras ilegales. Ese tratamiento genera las denominadas “salmueras”, residuos que se habrían desechado, bien a través de los propios acuíferos, bien a través de la rambla del Albujón, que desemboca en el mar Menor, empeorando cada vez más su situación.

En enero de 2018, la Guardia Civil inspeccionó en el marco de esta operación 67 fincas agrícolas y se precintaron 38 desalobradoras y 35 pozos que operaban sin autorización. Algunas de esas desalobradoras estaban escondidas en zulos y funcionando a pleno rendimiento.

Durante la instrucción se ha recabado numerosa documentación que evidencia el consumo de sustancias que se emplean para el funcionamiento de las desalobradoras y se han elaborado informes periciales sobre los cultivos existentes en cada explotación investigada, el déficit hídrico que tenía cada una de ellas y los pozos de los que se podría haber extraído el agua.

El juez apunta en su auto a cinco criterios comunes a todas las empresas que continúan siendo investigadas y que “muestran una pluralidad de indicios que permiten afirmar con un alto grado de probabilidad que ha podido desalar agua y efectuar vertidos no autorizados”.

En concreto, se trata de empresas que tenían en sus explotaciones uno o más pozos y una o más desalobradoras, que habían hecho acopio de consumibles que se emplean para el funcionamiento de esas máquinas, que sufrían déficit hídrico según los informes periciales y, en algunos casos, que habían extraído cantidades de agua cuantificadas y que no pueden ser usadas en su estado original para el riego.

El nuevo informe pericial que solicita ahora el juez para continuar con la instrucción pretende determinar, además de la cantidad de presuntos vertidos de cada una de las empresas, si las operaciones de desalación de agua y vertido de salmueras presuntamente realizadas “son susceptibles de dañar o generar un grave riesgo a la calidad del aire, del suelo o de las aguas, o a animales o plantas y si pueden perjudicar gravemente el equilibrio de los sistemas naturales, y en concreto al ecosistema del mar Menor”. También busca saber si se ha podido crear un riesgo de grave perjuicio para la salud de las personas y cuantificar el perjuicio económico causado por cada uno de los vertidos que se imputan a los investigados.

Este “caso Topillo” ha pasado por diversas vicisitudes judiciales: tras iniciarse la investigación, en febrero de 2018, la entonces titular del Juzgado Número 2, Miriam Marín, decidió dividir la causa en 26 partes diferentes, pero al ser sustituida por Garrote al frente del juzgado, este decidió agruparla de nuevo, como pedían la fiscalía y la acusación particular de Ecologistas en Acción. Además de las empresas agrarias, en la causa se investiga a una docena de funcionarios y ex altos cargos de la comunidad autónoma y la Confederación Hidrográfica del Segura, entre ellos, el exconsejero Antonio Cerdá, o el expresidente de la CHS Salvador Fuentes Zorita.





06 de desembre 2020

Volcà indonesi entra en erupció i desallotgen a 2.700 persones

El dia diumenge 29 de novembre, el volcà conegut com Ile Lewotolok, en la província  d'Indonèsia de Nusa Tenggara Oriental, va entrar en erupció causant diferents tipus d'impactes. Va emetre una gran columna de cendra, pel que la població va tenir que evacuar les seves cases i se'ls va recomanar romandre fora d'un radi de 4 quilòmetres des del cràter. També van tomar com a mesura preventiva l'ús de mascarilles i altres coses per evitar posibles problemes de salut als residents. 
Com es sap, aquest volcà es troba en el anell de foc, pel que no es extrany que no hi hagin víctimes, ja que el gobern sap com ha d'actuar davant aquest risc



LA VANGUARDIA 29/11/2020 

Yakarta, 29 nov (EFE).- El volcán Ile Lewotolok, situado en la provincia de Nusa Tenggara Oriental, en Indonesia, entró hoy en erupción, lo que obligó a la evacuación de más de 2.700 residentes, informaron las autoridades.

El volcán emitió una columna de humo y ceniza gris oscura y espesa de 4.000 metros de altura que se desplazó hacia el este y el oeste del volcán, donde las autoridades han establecido un radio de seguridad de 4 kilómetros alrededor del cráter, indicó la agencia de prevención de desastres, BNPB.

Las autoridades, que elevaron la alerta en la zona a nivel 3 de una escala de 4, recomendaron el uso de mascarillas y otros utensilios para proteger los ojos y la piel y reducir así el impacto de la ceniza en la salud.

La agencia de prevención de desastres dijo en un comunicado que no había de momento noticias de ninguna víctima por la erupción del volcán que se encuentra a unos 2.600 kilómetros al este de Yakarta, y cifró en 2.782 el número de personas evacuadas de una treintena de poblaciones.

Indonesia alberga más de 400 volcanes en cerca de 17.000 islas, de los que 129 están activos y, de estos, 65 se encuentran calificados como peligrosos.

El archipiélago indonesio se asienta dentro del denominado "Anillo de Fuego" del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica, y que es sacudida por unos 7.000 temblores al año, la mayoría de escasa magnitud.EFE.


L' Atlàntic avisa: el clima d'aquesta zona s'està tropicalitzant

Els canvis climàtics són presents en les nostres vides des de l'inici de l'història de la Terra, i poden ser causats per diferents factors, com per exemple, una variació de la radiació solar,  la deriva continental o períodes amb forts fenòmens geològics.
A l'oceà Atlàntic, el clima i les seves terres adjacents estan influïdes per les temperatures de les aigües superficials i els corrents d'aigua, a més dels vents. A causa de la gran capacitat dels oceans de retenir la calor, els climes marítims són moderats i sense variacions estacionals extremes. Els corrents oceànics contribueixen al control climàtic transportant aigües càlides i fredes a altres regions. Les terres adjacents estan afectades pels vents que són refredats o escalfats quan bufen sobre aquests corrents. Els ciclons tropicals (huracans) es formen mar endins a la costa d'Àfrica, a prop de Cap Verd i es mouen a l'oest cap al mar Carib; poden aparèixer des de maig a desembre, però són més freqüents d'agost a novembre.
En aquest cas, una sèrie d'huracans amb tendència tropical estan influint sobre el clima habitual d'aquest oceà. Com explica l'expert en ciclons Juan Jesús González Alemany, aquest fenomen està molt probablement relacionat amb el canvi climàtic, però calen més estudis per comprendre-ho millor. 

Huracans a l'Atlàntic

El país 25-11-2020

El Atlántico está avisando. Este es el resumen de los cambios que se están observando en los últimos años en la dinámica atmosférica que afecta al norte de la Macaronesia, región que engloba Azores, Canarias, Madeira e islas Salvajes, así como la franja marítima a suroeste de la península Ibérica. Todo indica que en esta zona el clima se está tropicalizando.

En los últimos 15 años, desde la llegada de la histórica tormenta tropical Delta en Canarias en 2005, dichas regiones han sido testigo de un aumento considerable del paso de ciclones con características tropicales. Estos ciclones son áreas de bajas presiones de tiempo adverso que no muestran un típico comportamiento de las borrascas de latitudes medias -o ciclones extra tropicales- a las que solemos estar acostumbrados a esta zona de la Tierra. A cambio, muestran características más similares a los típicos ciclones tropicales que suelen afectar a la región caribeña, al otro lado del Atlántico. De hecho, estos fenómenos cada vez se están pareciendo más a los ciclones tropicales en su estructura y naturaleza. Tal es así que el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos ha aumentado el estudio y vigilancia de nuestra cuenca en los últimos años y ha puesto nombre a un apreciable grupo de estos fenómenos.

Esta anomalía, de hecho, se ha incrementado en los últimos cinco años. Tenemos varios ejemplos notables:

- El huracán Alex (2016), que se generó a sur de las Azores y pasó a unos 1.000 kilómetros del archipiélago canario. Sus vientos máximos sostenidos fueron de 140 kilómetros por hora, hasta llegar a categoría de huracán y navegar por todo el Atlántico norte de forma inusual. Se convirtió en el primer huracán en formarse en un mes de enero desde 1938.

- El huracán Ophelia (2017), el primer huracán de categoría 3 en la escala de Saffir-Simpson en el Atlántico oriental desde que hay registros (1851). Ophelia alcanzó vientos máximos sostenidos de más de 170 kilómetros por hora.

- El huracán Leslie (2018), el primer huracán a estar tan cerca de la costa peninsular (100 kilómetros). Golpeó Portugal de madrugada con vientos de hasta 190 kilómetros por hora.

- El huracán Pablo (2019), el que se ha formado más cerca de Europa.

- Y como colofón final tenemos la tormenta tropical Theta, que hace unas semanas amenazaba Canarias y quedó a tan sólo 300 kilómetros de afectar de lleno a las islas.

Además de estos casos, hay una larga lista que los acompañan para ser extremadamente anómalos y afectar dichas regiones. De tal manera que en los últimos cinco años la frecuencia se ha incrementado a un por año e incluso a más de uno en los dos últimos años. Antes de 2005, la frecuencia era de uno cada tres o cuatro años, sin llegar a representar un peligro notable de impacto.

Anomalía de la temporada 2020

Esta rareza está de acuerdo con lo que ha pasado en la temporada de huracanes de este año, que abarca desde junio a noviembre. Ya las predicciones venían apuntando a una temporada muy activa y finalmente se han formado 30 ciclones, lo que ha supuesto un auténtico récord. Esto ha implicado utilizar letras del alfabeto griego para nombrarlos, adentrándose más allá de la histórica temporada del 2005. Por otra parte, esta temporada también se ha caracterizado por ser activa en huracanes mayores, aquellos de categoría 3 o más . De hecho, conforma un récord junto con las cuatro temporadas anteriores por ser la primera vez desde que se tienen registros (1851) en la que se forma a lo menos un huracán de categoría 5 durante cinco temporadas consecutivas. Esto último es muy consistente con las proyecciones del cambio climático; los huracanes más intensos cada vez más fuertes y frecuentes en proporción.

¿Qué dicen los estudios con respecto a el cambio climático?

Volviendo a la tropicalización de esta parte de mundo, ante los Cambios detectado en cabe preguntarse si hay algunas relaciones con el cambio climático. La respuesta es sí, pero Hacen falta más estudios. Por un lado, debemos conocer la relación con los acontecimientos observados, para ello en España todavía no es Tenemos la Capacidad técnica de acero este tipo de estudios operativos de atribución que sí se hace en otros país. Lo que sí Podemos establecimiento es una relación fundamentada en los estudios de proyección de Escenarios climáticos futuros, que vislumbran una mayor frecuencia de llegada de estos Fenómenos en nuestra cuenca. Es aquí donde sí Podemos establecía 1, acceso, aunque se requiere más investigaciones que confirman y afinan Aún más las características concretas de estos futuros eventos para poder efectuar una mejora en los planas de adaptación al cambio del clima esperable.

Si bien se Cierta que Probablemente nunca conseguirían intensidad mayores como categoría 3 o más, huracanes y tormentas tropicales de menor entidad son también vigiladas con especial atención miedo super alto impacto en las costas estadounidenses, a lo que hay que añadir que en España no estamos tan preparados por ellos.

Otra característica a tener en cuenta se han mostrada una mayor incertidumbre en super predicción. Al contrario que en los trópicos, donde las trayectorias de los ciclones son afectadas por factores más fácilmente predecibles, cuando estos ciclones comienzan a acercarse a nuestra región de latitudes medias empiezan a ser Afectados por factores menos predecibles con el consiguiente aumento de la incertidumbre. Otro aspecto importante es el potencial que tienen de causar un mayor impacto Cuando empiezan a evolucionar a borrascas de latitudes medias -transformación llamada transición extra tropical- lo que las saca ampliar super radio de acción.

Finalmente, resulta Importante explicar també las posibles incertidumbres en las tendencias inherentes al fenómenos de los que estamos hablando. Si bien todos estos Cambios siempre se consideran con referencia a los registros históricos que comienzan en 1851, se Cierta que a partir de 1966 Cuando realmente se puede devolver los registros como robustos y comparables a los de Nuestra época actual puede ser Cuando se Pudo empezar a observarse mediante satélite. Por lo tanto, siempre hay que tener esto en cuenta Cuando hablamos de tendencias observadas en ciclones tropicales y huracanes.


El següent vídeo mostra l'origen de l'oceà Atlàntic:


Empreses espanyoles donen una oportunitat a l' hidrogen verd com a forma d'energia

L' hidrogen verd, podría ser una gran alternativa com a font d'energia per les próximes dècades ja que no es nociu per l'atmosfera, fent així que se li pugui treure un gran profit per a moltes aplicacions.

El funcionament de l'hidrogen verd es basa en l'electròlisi, un procés que a partir de l'aigua (H20), separa les molècules d'hidrogen i d'oxigen, aconseguint així l'element més lleuger de la taula periòdica.  Aquesta font es pot utilitzar en múltiples àmbits, un d'ells seria el transport, es podría fer servir tant en motos, com en autobusos. En concret, aquesta aplicació sería de les més importants i notables pel nostre planeta, perquè la quantitat de CO2 que s'allibera al dia només contant els vehicles és massa gran, per tant si s'aconseguís fer això es donaria un gran pas ja que emitirien vapor d'aigua i no hi hauria un impacte mediambiental notable. Així mateix, es podria emprar pel consum domèstic (electricitat, calefacció, aigua calenta...). 

Com tot en aquesta vida, l'integració de l'hidrogen verd al nostre planeta seria bastant costosa, però donar-li una oportunitat és la millor forma d'intentar fer un canvi.


L' hidrogen verd, podrà satisfer una quarta part de la demanda mundial de l'energia al 2050


Ni es una moda ni un sueño imposible de alcanzar. El compromiso con la descarbonización de la economía en 2050 es una realidad. Y en esa carrera hacia un planeta libre de emisiones de carbono hay una tecnología que aspira a convertirse en el acompañante perfecto de las renovables: el hidrógeno verde. Este combustible, obtenido por electrólisis, un proceso que separa las moléculas de hidrógeno y oxígeno que componen el agua mediante la aplicación de una corriente eléctrica de origen renovable, está en la diana de las inversiones y se ha consolidado como una apuesta estratégica de la Unión Europea por su papel clave en el cumplimiento de los objetivos medioambientales.

Sus posibilidades son múltiples. Podrá utilizarse en la industria, como alternativa a los usos que no pueden ser electrificados (sector de la petroquímica, de los fertilizantes...) y que todavía dependen de combustibles fósiles. También tendrá cabida en la movilidad, para el transporte pesado y para los vehículos ligeros, que con un depósito de hidrógeno y una pila de combustible –transforma el hidrógeno en energía eléctrica y solo emite vapor de agua– conseguirán 700 kilómetros de autonomía y una recarga en cinco minutos. En el ámbito residencial, será capaz de sustituir al gas natural y, a nivel energético, ayudará a corregir los desajustes entre producción y consumo ya que los electrolizadores –sistemas de producción de hidrógeno renovable– podrán transformar el excedente de electricidad de primavera-verano en H2, que se almacenará para, en otoño-invierno, usarse en pilas de combustible para producir energía eléctrica y en turbinas para generar calor.

La Unión Europea calcula que este gas inocuo para la atmósfera podrá satisfacer la cuarta parte de la demanda mundial de energía de aquí a tres décadas, frente a su escasa aportación actual, y que moverá 630.000 millones de euros anuales… Un negocio de futuro en el que España no quiere quedarse rezagada.

Tareas pendientes

Pero aún quedan desafíos por superar. El principal escollo es el elevado coste. «La producción de hidrógeno por esta vía es el doble de cara que a partir del gas natural, por lo tanto, en estos momentos no es una alternativa comercial. Habría que pasar de unos costes de producción de 4-7 dólares el kilogramo a 2 dólares», dice Atienza. Para ello será necesario una caída de los precios de la electricidad y de los electrolizadores. Desde la AeH2 recuerdan, eso sí, una tendencia esperanzadora: «Las energías renovables han bajado mucho de precio y la electrólisis se ha vuelto más competitiva y eficiente».

Aun así, a día de hoy el hidrógeno verde sigue siendo una tecnología incipiente que tiene sentido como orientación a largo plazo. «Como no es competitiva, hay que fijar algún mecanismo de apoyo, que pueden ser subvenciones a la inversión, ayudas a la producción… Hay que establecer un marco para hacer viables estas inversiones, pero las más interesantes con el menor coste de subvención posible y, además, en un volumen que se escalone a lo largo de la década con el fin de ir dando tiempo a que aprovechemos plenamente la curva de aprendizaje», subraya Atienza.

«Otro reto es que haya un ambiente favorable, desde el punto de vista legislativo, para que estos proyectos se puedan realizar. Las empresas van a estar invirtiendo sin ninguna rentabilidad… pues que haya un marco regulatorio que pueda fomentar estos proyectos, ya no solamente para la generación masiva de hidrógeno sino para toda la cadena de valor», indica la profesora Alonso. Desde Ajusa comparten la necesidad de «un marco regulatorio estable que permita seguridad en las instalaciones, pero sobre todo que quite burocracia». La comisaria europea de Energía, Kadry Simson, anunció recientemente la creación de un marco regulatorio a nivel europeo que estará listo a lo largo del próximo año. 

El primer elemento de la tabla periódica nunca había acaparado tanta atención en el tejido empresarial y las instituciones europeas. Su despegue definitivo tardará décadas en llegar, pero hoy pocos dudan de que es un negocio prometedor que esta vez, sí, España aún está a tiempo de liderar.

Despliegue de iniciativas

Repsol. Invertirá entre 2.200 y 2.900 millones de euros en el periodo 2021-2026 en proyectos vinculados con el hidrógeno verde. La compañía es el mayor consumidor de hidrógeno en España, con el 72% del total, y es el primer productor del país.

Iberdrola. Prevé desarrollar 800 megavatios (MW) de hidrógeno verde en las plantas que el fabricante de fertilizantes Fertiberia tiene en Puertollano (Ciudad Real) y Palos de la Frontera (Huelva), lo que supondrá una inversión de 1.800 millones de euros hasta 2027.

Enagás. La compañía presidida por Antonio Llardén trabaja en unos 12 proyectos de hidrógeno en nuestro país a desarrollar en el periodo 2021-2023, que podrían movilizar alrededor de 1.500 millones de euros de inversión.

Endesa. Tiene en marcha, en distinto estado de avance, un total de 22 proyectos en las islas Baleares y Canarias, que van desde la producción de electricidad con turbinas de hidrógeno a un plan de adaptación progresiva de la generación actual al uso del hidrógeno verde.

Acciona. Está inmersa en un proyecto europeo coordinado por Enagás en el que también participan Cemex y Redexis, Green Hysland, que generará, distribuirá y utilizará en Mallorca al menos 300 toneladas de hidrógeno renovable al año, producido a partir de energía solar.

Naturgy. Estudia dos proyectos de electrolizadores, uno de 30MW de potencia en La Robla (León), junto con Enagás, y otro de 50 MW en Meirama (La Coruña), donde ha echado el cierre a la central térmica y está desarrollando una iniciativa de emprendimiento.





05 de desembre 2020

Nedant en plàstic a Espanya

De tota Europa, Espanya és el país que més impacte genera al medi ambient, sent el país en que més plàstic acaba al mar. Solucionar aquest problema no es fàcil, ja que la major part de les aigües envoltant la península Ibèrica són profundes, de mitjana uns 3000 metres aproximadament, a més a més, el fons marí que envolta el país està ple de muntanyes i serralades submarines, cosa que dificulta encara més la tasca de retirar els residus del mar.

Això acaba resultant en abocadors submarins que destrueixen ecosistemes, s'han de posar solucions i recuperar aquest món tan important i tan únic que s'està destruint.

Platja de Barcelona












Ambientum, 27-11-20.

España es el país de la Unión Europea que más plásticos vierte al mar, 126 toneladas diarias, y más del 90% de sus aguas son muy profundas, lo que hace inviable la retirada de residuos a esos niveles, según el estudio “España: buceando entre plásticos” de la organización Oceana.

El informe identifica los puntos con más riesgo de convertirse en “trampas de plásticos” y pone de manifiesto la “elevada susceptibilidad” de las aguas españolas a acumular estos residuos debido a la alta urbanización del litoral, a la existencia de un mar semicerrado como el Mediterráneo y a la compleja geomorfología de los fondos marinos.

A ello hay que añadir que España es el segundo país de la Unión Europea en profundidad de sus mares y que está rodeada en un 92,4% por aguas profundas, con una media de 3.013 metros, lo que según Oceana equivaldría a la cordillera de los Pirineos invertida en el fondo del mar.

“Trampas de plásticos”

Los cañones, escarpes y montañas que existen en las profundidades de la costa española son enclaves ricos en biodiversidad, pero también “trampas de plásticos” que hacen imposible retirar la basura, señala la organización.

Aseguran que las zonas costeras más pobladas y las desembocaduras de los ríos son los principales orígenes del vertido de plástico que acaba en el fondo del mar, siendo la vertiente mediterránea, en especial el archipiélago balear, algunas zonas de Murcia y el Mar de Alborán las áreas marinas más vulnerables.

Así mismo, destacan como más vulnerable por su alto valor ecológico la zona que delimita la plataforma continental cantábrica (escarpe de Galicia) y que acumula cañones y montañas submarinas, con áreas de especial confluencia como el norte de Cantabria y País Vasco.

El estudio también constata que el 80% de los plásticos que se vierten al océano provienen de la tierra y que la mayoría de las veces llegan al mar a través del sistema de alcantarillado, arrastrados por tormentas o movidos por el viento desde entornos urbanos y canalizados a través de desembocaduras, bahías y zonas fluviales, sin olvidar que cada vez son mayores los deshechos que arrojan los barcos pesqueros o recreativos.

Residus llançats al mar

Vertederos submarinos

Para el director de Expediciones de Oceana en Europa, Ricardo Aguilar, “uno de los peligros más desconocidos es que las estructuras geomorfológicas a gran profundidad actúan como trampas de plástico y convierten a esos ecosistemas en vertederos submarinos”.

En el informe de Oceana se pone de manifiesto la necesidad “urgente” de crear “un marco legal ambicioso” para aplicar la Directiva de Plásticos de un Solo Uso en España “e ir más allá de los mínimos marcados por la UE para reducir de forma drástica” la llegada de esta basura al mar, según señalan desde la organización.

Entre las medidas que proponen para hacer frente a estos vertidos figuran eliminar vasos y recipientes de comida desechables en bares, restaurantes y edificios de la Administración, reducir el consumo de toallitas húmedas o suprimir las anillas de plástico de los packs de bebidas y la suelta de globos.

Además consideran necesario que se fijen objetivos en la comercialización de envases rellenables, que se introduzca un impuesto a productos de plástico de un solo uso no sanitarios y también desarrollar protocolos de retirada de residuos del fondo del mar.


Video al respecte dels plàstics al mar:





03 de desembre 2020

El canvi climàtic augmentarà els brots de malaties infeccioses en animals salvatges


EL CANVI CLIMÀTIC AUGMENTARÀ ELS BROTS DE MALALTIES INFECCIOSES EN ANIMALS SALVATGES

Darrerament, la revista Science ha publicat un estudi sobre el vincle entre l'augment de brots de malalties infeccioses en animals salvatges i el canvi climàtic. Segons aquest esudi les espècies més afectades, es a dir, entre les que hi han hagut més brots, són les adaptades al clima fred i templat. Aquestes zones són: Sibèria, Alaska i Canadà, seguidament d'Europa i part dels Estats Units.

Pel que fa als humans, l'augment d'aquests brots de malalties infeccioses comporta un gran risc, perquè malgrat siguin en animals salvatges d'una manera o altre mantenim contacte amb ells i ens podem contagiar, ja que la majoria dels patògens humans s'originen a la vida salvatge.

Un clar exemple actual es el SARS-CoV-2, propagat en aquest cas pels ratpenas, però com aquesta malaltia n'hi han hagut altres com el VIH, l'ébola o el virus del Nil Occidental.

Fotografia de tres óssos rentadors

El Mundo 19/11/2020

Un nuevo estudio publicado en 'Science' señala que el calentamiento global está contribuyendo a la circulación de enfermedades infecciosas en las regiones con climas fríos y templados, cuyas especies han estado más protegidas de la invasión de parásitos.

Durante mucho tiempo los efectos del cambio climático se veían como una amenaza lejana e imprecisa. Pero el aumento de las temperaturas, los fenómenos meteorológicos extremos y la subida del nivel del mar los han convertido en una realidad acuciante. Además, los científicos saben que cualquier modificación del equilibrio natural del planeta provoca a su vez cambios profundos y complejos en las comunidades ecológicas. Otros efectos inesperados comienzan a perfilarse, entre ellos variaciones en la distribución de las enfermedades infecciosas, que incluyen cambios en los organismos que las provocan -hongos, bacterias o virus- y en los vectores biológicos que las transmiten.

Esta semana la revista Science publica un estudio que explora ese vínculo entre el cambio climático y el riesgo de enfermedades en la vida salvaje. En concreto, apunta que las especies adaptadas a hábitats fríos y templados son las que más aumentarán el riesgo sufrir de brotes de este tipo de patologías. "Tradicionalmente las especies adaptadas a las temperaturas bajas -que viven típicamente en latitudes septentrionales o en altitud- han estado protegidas de la invasión de especies parásitas por inviernos duros", explica Jeremy Cohen, investigador de la Universidad de Florida Sur y autor principal del estudio. "Pero los inviernos se están volviendo más suaves y cortos".

En concreto, Siberia, Alaska y Canadá estarían entre las regiones más afectadas, seguidas de Europa y los estados más septentrionales de EEUU. En cambio, las especies de climas cálidos podrían experimentar ligeras reducciones en el riesgo de sufrir enfermedades. "Hemos evaluado cómo el cambio climático puede influir en las enfermedades que afectan a la fauna silvestre, no en el riesgo total de experimentar infecciones", matiza Cohen.

"Las especies que viven adaptadas a zonas de más calor -tropicales, subtropicales o de baja elevación- siguen experimentando un mayor riesgo de parasitismo en general, pero hemos comprobado que es poco probable que el cambio climático aumente esos riesgos y que, incluso, puede reducirlos ligeramente".

Los resultados muestran que los vínculos entre la biología y el clima existen, pero también que son complejos y difíciles de desentrañar. En décadas anteriores algunos biólogos habían propuesto la llamada 'hipótesis del desajuste térmico' para explicar estas nuevas pautas, sugiriendo que los patógenos tienden a tener una mayor tolerancia a las temperaturas anormales que sus huéspedes. Así, un cambio en el ambiente afectaría más al anfitrión que al patógeno que puede afectarlo. El estudio liderado por Cohen ha puesto a prueba esta hipótesis analizando un conjunto de datos que describe la prevalencia de patógenos en 7.346 poblaciones animales en todo el mundo, con datos sobre la meteorología y el clima local para cada lugar. La modelización de los datos en el estudio apoya la hipótesis del desajuste térmico", concluyen los científicos, "tanto en ecosistemas terrestres como de agua dulce" y es especialmente pronunciada en animales de sangre fría.

NUEVOS RIESGOS PARA LOS HUMANOS

Otros estudios ya habían avanzado que el cambio climático está modificando los patrones de propagación de enfermedades infecciosas, con los riesgos que eso implica para los seres humanos y para la biodiversidad. En 2018 un artículo en la revista The Lancet mencionaba estas enfermedades transmisibles como una de las principales amenazas que el calentamiento global presenta para la salud pública. Ya en 2005 un documento del ministerio de Medio Ambiente anticipaba la extensión geográfica a nuestro país de patógenos y vectores subtropicales adaptados a sobrevivir a climas menos cálidos y más secos, como así ha sido. "Entre las enfermedades vectoriales susceptibles de incrementar su incidencia en España se hallan algunas transmitidas por mosquitos (dengue, enfermedad del Nilo Occidental, malaria) o garrapatas (encefalitis)", afirmaron entonces los autores del documento.

Este año la pandemia ligada al SARS-CoV-2 ha supuesto un recordatorio sobre la fragilidad del equilibrio natural. Las zoonosis se han convertido en una nueva fuente de preocupación para la población mundial. "Aunque no hemos estudiado los datos de enfermedades humanas específicamente, las enfermedades en la vida salvaje son importantes para la salud pública, porque la mayoría de los patógenos humanos se originan ahí", señala Cohen, que cita los ejemplos del VIH, el ébola o el virus del Nilo Occidental además de la Covid-19. "Y nuestras conclusiones apuntan a que las enfermedades que circulan entre humanos y otras especies naturales podrían comenzar a ser más comunes en las zonas templadas cada vez más al norte".

Al mismo tiempo los científicos también señalan la multiplicidad de factores que causan las epidemias, que harán necesarias nuevas investigaciones antes de poder especificar el papel del clima en cada uno de los patógenos. Cada enfermedad infecciosa tiene características propias, en las que el cambio climático se entrelaza con la biología de los agentes infecciosos y con los cambios en las formas de vida de las especies a las que afectan. Por eso cada vez más investigadores subrayan la importancia de fomentar y desarrollar programas de vigilancia y control específicos para las enfermedades de transmisión vectorial de cara a prevenir futuros brotes.


01 de desembre 2020

Més màscaretes que meduses en els oceans

Actualment les màscaretes quirúrgiques no reutilitzables són de les més usades per la població, malgrat ser altament contaminants. Aquestes creen un gran impacte mediambiental ja que conscientment o no per desgràcia moltes d'elles acaben en les mars i oceans. Aquest tipus de màscaretes poden arribar a trigar fins a 400 anys a descompondre's a més mentre es descomponen deixen anar micro plàstics que poden ser empassats per les espècies marines i això pot crear un risc induït perquè posteriorment aquests micro plàstics també poden ser ingerits pels humans.

Podem ajudar a reduir aquest impacte per exemple utilitzant màscaretes de tela que són reutilitzables o si no també rebutjant les màscaretes en el contenidor corresponent i no tirar-les en qualsevol lloc.

Una màscareta pot arribar a trigar 400 anys en descompondre's.



La pandemia tiene el mérito de haber logrado lo que muchos ecologistas han intentado sin éxito durante décadas: frenar el ritmo de vida tan contaminante de las ciudades. Una consecuencia positiva de este fatídico año, ha sido la reducción de la huella medioambiental, algo que ha ocasionado que el día de la sobrecapacidad se retrase tres semanas.

En el lado contrario, las mascarillas están comenzando a inundar cualquier hábitat natural, y ya preocupa la presencia de este material sanitario en el océano: se estima que en muy poco tiempo habrá más mascarillas que medusas en el mar. Además, hay que tener en cuenta que una mascarilla tarda en degradarse 300 años.