L’impacte induït provocat
pels cotxes, les fabriques i industries,… sobre la nostra atmòsfera en forma d’emissió de gasos d’efecte hivernacle és molt present en el nostre cap. Tot i
així, ara, al pensar en l’efecte hivernacle i el canvi climàtic que provoca, haurem de pensar, també en l’impacte
provocat pels embassaments i pantans, que eren fins ara únicament, un
recurs molt valuós per a la
societat.
Aquesta sorprenent informació ve donada per l’estudi de la
Universitat Estatal de Washington, que ens diu com la creació d’aquestes masses
d’aigua sobre sols rics en materia orgánica provoca l’alliberament de metà
a l’atmòsfera.
El que en principi és un recurs provocat per l’impacte sobre
una superficie de terreny, veiem com a més a més, s’ha convertit en una font de
risc a tenir en compte.
Embassament català |
La
participación del ser humano en el calentamiento global es incontestable.
Apelando a un supuesto progreso, las emisiones de gases de efecto invernadero
se han disparado hasta límites insostenibles. Y cuando hablamos de estos gases,
todos imaginamos coches y hasta la industria ganadera. Muy pocos, sin embargo,
lo relacionan con los embalses y pantanos.
Universitat de Washingon |
Un
grupo de investigadores de la Universidad Estatal de Washington ha concluido
que los embalses son una gran fuente de gases de efecto invernadero. Hasta
ahora se desconocía el impacto de estas acumulaciones de agua, pero este
estudio ha revelado que los pantanos emiten el equivalente a más o menos un
gigantón (1.000.000.000 toneladas) de dióxido de carbono al año. Esta cifra
equivale a un 1,3 por ciento de todas las emisiones producidas por los seres
humanos. Es decir, los embalses y pantanos de todo el mundo producen más gases
de efecto invernadero que todo Canadá.
El
estudio, publicado en la revista BioScience, apunta a que los embalses son una
gran fuente de metano. Pero, ¿cómo se libera? Al inundarse zonas que contenían
una gran cantidad de materia orgánica (carbono), como árboles o pastos, éstos
se descomponen en dióxido de carbono, metano y óxido nitroso. Además, el
nitrógeno y el impulsan el crecimiento de algas en los embalses, generando así
más microorganismos responsables de la producción de más metano.
Matèria orgànica en descomposició |
Los
riesgos del metano
Este
gas (CH4), es 34 veces más contaminante que el CO2: en una media de tiempo de
100 años, cada kilo de metano calienta la Tierra 25 veces más que la misma
cantidad de CO2. Estas emisiones equivalen a las generadas por el cultivo de
arroz o a las producidas en la quema de biomasa. Ambas actividades están
incluidas por el Intergovernmental Panel of Climate Change (IPCC).
La
incidencia del metano es muy grande en el calentamiento global. Así lo confirma
Bridget Deemer, una de las investigadoras responsables del estudio, que alerta
que el problema es “mayor de lo que se preveía”. Los embalses y pantanos de
todo el mundo producen más gases de efecto invernadero que todo Canadá “En
términos globales, contribuye en un 80% al calentamiento provocado por las
grandes reservas de agua.
La
incidencia de los embalses en la producción de metano es un 25% mayor de lo
esperado. Es un dato importante teniendo en cuenta que hay tantos proyectos de
nuevos pantanos en construcción”, según Deemer Sin embargo, hay aproximadamente
220 veces más dióxido de carbono en la atmósfera que metano por lo que el
metano contribuye de manera menos importante al efecto invernadero. Este
estudio no significa que los embalses sean malos ni que deban desaparecer los
ya existentes. Estas investigaciones muestran el impacto del hombre en su
entorno y le apremian a hacerse responsable de su huella.